Reunión Familiar [privado- Lyan y Romina]

Trsitán habia regresado de su viaje de fin de semana de Londres, sabia de antemano que sus padres lo estarian esperando en casa y sabia que sería un mas extraño llegar a casa y ver aquel hombre que días atras habia vuelto tras un abandono de toda la vida del pequeño hibrido. Ese viaje le habia traido muchas dudas que pretendia exigir que se aclaren ya sean por su joven e inmortal madre y por su joven padre, dudas que durante su estacia en Londres habian surgido y que le carcomian la curiosidad, tenia mucho que preguntar y no planeaba un "luego te digo hijo" o "aun estas muy pequeño para comprender" Tristán se siente un hombre con capacidad para comprender y razonar las cosas a la perfección.

Por fin las calles del pueblo se hicieron presentes, luego de un gran viaje Dreinos era un pueblo bastante moderno para ser un lugar que no aparece en los mapas y tambien un pueblo con escasos 2000 habitantes, recorrio la escuela donde estudia, las calles y el camino que va al bosque donde su ahora familia vive, como todo adolecente esta conduciendo a gran velocidad como suele ser su costumbre, puesto que el velocimetro no desciende de 100km/hr ascendiendo a 120 km/hr, sabe que si sufre un accidente sus heridas se regeneran, pero la regañada que su madre le dara no se compara con nada.

A lo lejos comenzo a vsisualizar su casa, ese enorme jardín del frente delataba su increible casa, misma que sus amigos alagan cada vez que acuden a ella, aunque tambien alagan la belleza de su "tía" Romina, su madre pero ella le dice que los humanos no saben de la existencia de los seres de la noche y menos de los seres como él, asi que para el mundo su madre es su "tía" que lo adopto a la muerte de sus padres y que su "tío" siempre esta de viaje por eso no lo conocen, mismo que es su padre.

El motor de su auto comenzo a escucharce por lo que aparco su auto en la cochera, apago el motor y la musica a todo volumen y descendio con su maleta del interior de lujoso auto, salio y comenzo a caminar hacia su casa la tarde de domingo era muy hermosa, apenas son las 4:00p.m, hora en la que el sol esta mas que fuerte y por dicho motivo las cortinas de su casa estan completamete corridas; Camino hacia el jardín tracero de la casa y abrio la puerta de crista que separa al jardín de la casa, entro y el choque de olores golpeo su olfato, el olor a licantropo y vampiro se hizo presente, el olor de su padre era mas que evidente ya que es el que predomina en el joven hibrido y el olor de su madre es bueno, mas que conocido por el pequeño Tristán.

-¡Mamá! ... ¡papá!... ¡ya llegue!

Grito el pequeño avisando su llegada, aunque su olor seguramente lo delato desde antes de llegar a la puerta. Él pequeño camino hacia donde los olores le indicaban pero el olor a comida en la cocina lo detuvo justo antes de ir tras sus padre, fue directo hacia la estufa y destapo una de las ollas que estan tapas y miro en su interior, sus ojos le brillaron mas que nunca ya que su madre habia preparado Macarrones al horno, por lo que le improto muy poco la emosión de sus padres, fue al estante de platos y se sirvio un enorme plato de comida.

-dios de la cocina, gracias por hacer que mi madre cocine tan rico.

Musito con emosión seguido de un enorme bocado que se llevo a la boca, comenzo a degustar el increible sabor de los macarrones, se puso de pie y fue al refrigerador por algo de beber y encontro su adicción mas grande una coca-cola, la saco del refrigerador, fue un por un vaso y lo lleno de la gaseosa, a lo lejos unos pasos delataron a uno o ambos padres, pero le importo muy poco puesto que la comida es primero y luego sus dudas aunque seria alreves pero, su estomago manda en ese momento...en menos de lo pensado Tristán culmino con sus alimentos levanto los platos y los llevo al fregadero, por lo que los lavo y haciando mohines en la boca, para limpiarse con la lengua los resuduos de comida que aun quedan entre sus dientes, los sonidos caracteristicos de dicha operación eran muy evidentes, pero la voz de uno de sus padres lo hizo girar de golpe, le sonrio con un brillo en los ojos, dejo los trastes a un lado, sacudio sus manos del exceso de agua que aun quedo en sus manos y se lanzo a los brazos de uno de sus padres que lo esperaba a unos cuantos metros.

-no sabes cuanto te extrañe.

El pequeño hibrido sono muy feliz, deposito un beso en la mejilla de uno de sus padres y luego miro aun punto fijo de la cocina, realmente estaba feliz de volver a casa y mas despues de ese viaje que le dejo muchas dudas.



[**puse uno de mis padres por que no se cual de los dos respondera primero XD**]

Un fin de semana muy largo pero placentero, durante la ausencia de mi pequeño retoño, Lyan y yo hablamos de todo lo ocurrido en estos tres años, aclaramos muchas cosas e incluso discutimos, algo que suele ser normal en una relación de pareja, fue una simple discusión que termino en una dulce y placentera reconciliación. Durante la tarde del sabado y justo cuando el sol de estaba ocultando regresamos al templo que hizo que nuestro amor surgiera mas fuerte hace mucho tiempo, y tarde-noche del sabado hizo que reafirmara mas, recorrimos el templo casi en su totalidad, vaya tenia tanto tiempo que acudia a dicho lugar y pensar que vivo a una distancia muy escasa de ahi.

Pero en lo mas profundo de mi, la insertidumbre de como estara mi hijo estaba latente y mas estando en Londres, pero como se que a Greenwich ese maldito no acude por lo "aburrido" que es por ese motivo lo envio a ese lugar. El domingo por fín habia llegado y sabia que mi bebé llegara en cualquier momento, por lo que le prepare lo que tanto le gusta los macarrones al horno, no se por que le gusta tanto a mi no me sabe a nada, la comina no sabe a nada asi que no le siento el sabor a nada.

Lyan comio como un desesperado, parecia que en su vida habia comido lo que ocasiono que me riera por debajo ya que hace los mismos gesto que Tristán cuando come, corrijo, debora la comida sin duda alguna son tan parecidos incluso cuando se molestan ese instinto licantropo les brota terriblemente, al punto de hacerlo los seres mas detestables, pero como los amo, amo tanto a este par de enojones.

Lyan estaba dormido, supongo que por que comio muy rápido le dio sueño y cayo profundamente dormido, estando en la habitación miro su rostro lo acaricio y con mis dedos comienzo a rosar sus cabellos, sus gestos al dormir son muy expresivos, lanza unos gemidos supongo que se encuentra soñando y tambien se mueve mucho, pero el motor de un auto hace dibujar una sonrisa en mis labios, me mantengo sentada sobre la cama, para lentamente comenzar a levantarme y no hacer despertar a Lyan, una vez de pie, comienzo a caminar lentamente hacia la puerta que me resulta muy lejos, ya que si salgo rapido y se va a despertar, una vez afurea entre cierro la puerta y comienzo a descender por la escaleras, llego a la cocina miro comer como un desesperado a Tristán, de la misma manera en que su padre una hora atras deboro su enorme plato de comida, repitiendo como tres veces mas la comida, "por los dioses donde las va tanto alimento a estos hombres", miro a mi pequeño ponerce de pie y casi caigo al suelo al verlo lavar sus platos, pero sin darme cuenta el pequeño se acerco a mi y me dio un enorme abrazo, depositando un beso en mi mejilla para luego decir esas maravillosas palabras que me llenaron de alegría.

-no mas que yo cachorro.

Lleve mis manos por encima de su cabeza, obviamente hice un largo camino ya que comparada con él soy sumamente pequeña y mas teniendo zapatos de piso (zapatos sin tacon como zandalias), le acaricio el cabello y parte de su rostro, para luego abrazarlo con cierta fuerza, ya que la otra parte de mi vida esta en casa.

-pero dime mi amor, ¿como te fue?, ¿que hiciste?, vamos amor dime.

Musite con cierta alegria completamente reflejada en mi rostro, tenia tantas ganas de que me diga que vio, que hizo, nose que me diga absolutamente todo lo que le paso.

Tristán sintio cierto alivio al escuchar y sentir el gelido abrazo de su madre, estaba contento de verla y estar con ella, no queria soltarla ni un solo segundo puesto que el lazo que lo une a su madre es muy grande y fuerte sin ella, él no es nada por ese motivo le debe mucho. Poco a poco fue separandose de los barzos de su bella madre, para mirarla a los ojos y poder estar cara a cara con ella.

-y donde esta Ly..perdón ¿donde esta papá?

Pregunto corrigiendose asi mismo, bajo la mirada y sonrio por debajo para luego tomar la mano de su madre y besar la parte opuesta a la palma, llevo su otra mano por encima de la gelida mano de su madre le sonrio y comenzo a caminar hacia la sala, lugar donde suele estar con su madre cuando en Sahndoria llega el frío, pero esta vez acudiría a ese lugar de la casa en particular para aclarar cosas que no se atrevía a decir hasta él día de hoy.

Camino de la mano de su madre sonriendo y en silencio, no pretendia habrir la boca ya que lo unico que saldría sería cosas molestas y cosas sin sentido alguno que su madre no entendería en lo absoluto, por lo mismo espero hasta llegar a la sala, encontrarse con su madre y esperar la llegada de su padre para poder hablar con los dos y no tener que repetir las cosas.

Una vez en la sala se sento y luego la silueta de su madre paso frente a sus ojos, bajo la mirada y volvio a preguntar.

-crees que tarde mucho papá, es que tengo que hablar con ambos.

Tristán fue un poco mas directo, cambio las reacciones de su rostro tornandose un poco mas serio y calmado, algo a lo que su madre no esta acostumbrada, pero este día dara a conocer algo completamente diferente y hoy sus padres sabran lo mucho que ha cambia do el pequeño hibrido.

Sentí aquellas caricias que me dio Romina y luego noté que su olor se fue lentamente. Escuché el ruido de un motor y lentamente me levanté de la cama. No sabía que unos macarrones me pudiesen haber dado tanto sueño. Bueno la verdad es que hacía tiempo que no dormía muy bien. Me estiré levantando los brazos soltando un bostezo. Dejé caer lentamente los brazos y me incorporé. Quedandome de pie y mirando la habitación mientras me rascaba la nuca. Vi la puerta entrecerrada así que salí de la habitación. Me di cuenta que estaba en pantalones, pero la verdad es que tenía calor. Bajé con cuidado las escaleras ya que todavía iba un poco dormido. Miró a su alrededor y escuchó una voz que procedía de la sala. Se fue directamente hacía allí.

Hola hijo-dijo sonriente al volverlo a ver-¿Que tal te fue el viaje?

La voz de Tristán ahabia cambiado drasticamente, al parecer estaba algo preocupado por algo o alguien o yo que se, simplemente deseaba y añoraba mas bien que tanto su padre como yo estuvieramos juntos y hablemos con él, aun no entiendo el motivo por el cual desea aque estamos ambos a su lado pero me desespera la insertumbre del nosaber que pasa con él.

Mire algo extrañada cada una de las facciones de su rostro, habia algo en él simplemene me insitaba a pensar que algo habia cambiado en mi hijo, pero no se, tal vez son especulaciones mias, si seguramente solo es eso. Poco a poco el olor de Lyan comenzo a llenar el ambiente, sus pasos comenzaron a delatar su presencia, para luego escuchar su voz resonar en la habitación.

Sonrei un poco al verlo semiadormilado y luego me deje caer sobre el sillon, para acomodarme y escuchar lo que mi pequeño, travieso y dolor de cabeza de hijo tenia que decirnos.

-bien amor, ahora si ¿para que nos quieres?, habla antes de que comience a desesperarme.

Mi voz comenzo a sonar algo nerviosa y temblorosa, solo espero que no me salga con algo fuera de lo común o algo que mi amor de madre pueda soportar, como una novia, ya que eso seria algo un poco fuerte almenos para mi, si soy celosa y mas con hijo.

-habla o te interrogare hasta que digas absolutamente cada palabra y sabes que no soy nada sutil con los interrogatorios.

Ambos padres se encontraban en la misma habitación, el hibrido sonrio enormemente al ver la silueta del licantropo asomar por la entrada de la sala, le dedico una enorme sonrisa y noto ciertas marcas en el rostro del licantropo, supone que de sueño o algo parecido. Pero la voz desesperada e interrogante de su madre comenzo a sacarlo de balance para luego sonreir ya su madre sabe como interrogarlo de tal manera que le saca la información hasta dormido, o en alguna de las visiones que la vampiresa tiene.

-hola Papá, me fue muy bien y mamá porfavor no hables me desesperas, es mas espera un segundo para que busque las palabras necesarias para decirles lo que me intriga y mas que nada el motivo del porque los llame.

Tristán bajo la mirada, en el fondo tenia mucho miedo, miedo de la reacción de su madre, miedo de no saber manejar las cosas y miedo de lo que su padre le pueda decir respecto de lo que tiene que hablar, sabe que sera algo muy dificil de entender y mas por las cosas como se dieron y nacieron las cosas.

-bueno lo que les quiero decir es que estoy enamorado, se que es algo complicado, pero lo estoy.

Bajo la mirada y comenzo a recordar a su musa, aquella musa que salio de la nada y se convirtio en la mujer que poco a poco comenzo a habitar en su ser, en su alma y en su corazón, se apropio de su mente, sueños e incluso de su propio tiempo, o almenos asi lo siente.

-como se que lo estoy, pues por que cada vez que esta cerca mi corazón se agita mas, sol pienso en ella y me inspira a cantar, leer y soñar, cada vez que aspiro su aroma mi olfato se embriaga con la fragancia de sus cabellos y sus ojos son como los de las diosas mitologicas...me tiene completamente loco.

Tristán al hablar y expresarse de su amada su voz se eleva y se vuelve melodiosa, los ojos le brillan intensamente y los suspiros que deja escapar son tranquilos, calmados y muy romanticos...pero baja la mirada y observa a sus padres, no tiene ni la mas minima idea de como reaccionaran, esta algo asustado ya que dependiendo de las reacciones de cada uno de sus padres les dira el nombre de la mujer que le ha robado el corazón.

- y bien ¿que opinan?

[lamento la tardanza, escuela, trabajo, sueño...casi estoy medio muerto >.<]

La silueta y el olor de Lyan hicieron que una sonrisa se dibujara en mi rostro era mas que evidente la alegria que me daba ver a los dos seres que mueven mi mundo, sin ellos yo no sería absolutamente nada, desde que Lyan aparecio y se cruzo en mi camino mi vida cambio y desde que Tristán nacio mi vida volvio a cambiar, ahora y despues de muchos obstaculos estamos juntos, unidos y sobre todo nada ni nadie nos va a separar.

Lyan estaba aun semidormido, se notaba en su rostro es mas que evidente, pero apesar de estar con el cabello revuelto y con esa mirada de "cinco minutos mas porfavor" continua viendose increible ante mis ojos, no se si por que sea el unico ser al que amo tanto aparte de mi hijo pero asi lo veo. Luego de las presentaciones y de las preguntas hacia Tristán de como le fue en su corto viaje, mi pequeño retoño comenzo hablar hacerca de lo que le habia pasado y mas que nada el motivo por el cual esta y pedia hablar con nosotros.

Los nervios se hicieron presentes ante cada palabra que salia de los labios de mi pequeño, mismos que se manifestaban en mis manos las cuales no paraban de enrredarse la una con la otra, por extraño que fuese comenzaron a sudarme hasta, ya que mi hijo comenzo a darle vueltas y vueltas a lo que tanto le preocupaba; poco a poco comenzo a hablar y buscar las palabras que de su boca salian, hasta que dijo algo que jamas pense que sucediera, aquellas palabras que no pense escuchar tan pronto de sus labios, palabras que ocasionaron una mirada fulminante, llena de molestia y cierto recelo.

-que has dicho!

Mi voz retumbo en toda la habitación a sabiendas que de que ambos me mirarian, ¿esta enamorado?, pense detenidamente dando vueltas a la misma pregunta una y otra vez, como es posible, ¿por que ahora?, ¿quien es esa maldita entrometida que ha hosado meterse en la vida de mi hijo?, quien es.

Miles de preguntas comenzaron a rondar por mi cabeza ninguna tenia una explicació lógica, por que tenia que suceder esto ahora justo cuando mi bebe esta con nosotros y su padre ha vuelto una maldita entrometida ha enamorado a mi dulce y pequeño hijo.

- haber, quiero pensar que estas confundido y no razonas muy bien, tambien quiero pensar que esto es un maldito sueñop bizarron del cual despetare en un momento.

Respire profundamente intentando borrar de mi cabeza una imagen de hijo con una chica, misma que no perdonare en lo absoluto por intentar quitarme a mi razón de ser, a mi hijo, al ser al cual casi pierdo por culpa de Roger, al ser que amo por sobre todas las cosa y al cual protegere con mi propia vida.

-mira hare como que no he escuchado nada, los dejo para que hablen ya que creo que salgo sobrando.

Mire a ambos hombres uno el amor de mi vida y el otro mi hijo, seguidamente me puse de pie, denotando una enorme molestia cierta incomodidad ante lo que mi hijo habia dicho.

-creo que tendran mucho de que hablar, por eso mejor me marcho. Tristán no se que decir, pero creo que te ha quedado muy claro lo que pienso, no quiero ni saber el nombre de esa mujer, ya que si por error lo dices yo misma la destazo con los dientes y sabes que soy capaz de eso y de mucho mas. Lyan...

Me quede sin palabras mire a los ojos a Lyan con cierta trsiteza en la mirada, no se que pensara y no lo quiero saber, supongo que estara feliz de que su hijo este enamorado o tal vez reaccione de la misma manera que yo, la verdad no lose. Se que mi reacción no es la mas apropiada pero no puedo hacer nada para cambiar mi postura.

-Lyan, te veo mas tarde.

Desvia la mirada de mi amado para salir casi como Zombie de mi casa, caminaba sin rumbo fijo y solo tenia en la cabeza aquellas palabras de mi hijo, no se quien rayos sea esa maldita, pero el día que la conozca juro por todos los dioses que sabra de lo que es Romina Owen, y si a esa le va mal, la maldita que cometa la insolencia de solo pensar en estar con Lyan, esa cabara su propia tumba, ya que con mis amores NADIE se mete.

Lo estuve escuchando cada palabra de que hablaba, no entendía muy bien el asunto, pero si era importante para él, haría lo imposible para que este, mi hijo, fuese feliz.

Sonreí cuando lo escuché, me recordó aquella tarde que pasé con Romina en aquel teatro, en esa sala, el camerino, que me hacía recordar muchas cosas que eran mejor no decirlas, supongo que no las querría escuchar, así que continué escuchando la explicación de Tristán sobre el motivo porque estaba enamorado y lo que le ocurría.

Me quedé algo inexpresivo ya que estaba todavía un tanto dormido, pero sabía como reaccionaría Romina, así que sería mejor no decir nada hasta que pudiera hablar con él a solas.

Y como intuí vi la reacción de Romina no muy positiva ante aquel hecho, así que cuando la escuché irse creí que sería lo mejor de momento. Luego la miré en sus ojos se denotaba tristeza así que le sonreí para que al menos se mantuviera alegre y no pensará tanto en lo que le acababa de decir Tristán.

Vale amor...

dije al escucharla, mientras mi voz se mostró tranquila y segura. Al irse me acerqué a Tristán, le puse el brazo sobre los hombros de manera que pudiese estar cerca de él.

Tranquilo, que yo hablaré con tu madre, no te preocupes por su reacción-dije de manera dulce-me parece bien que estés enamorado-sonreí y le miré-Tristán dime ¿como es ella?-dije mientras me separaba de él y me sentaba y le hacía un sitio para que se sentarse a mi lado.

Las palabras de su madre fueron duras y frías, al parecer no le habia agradado en lo absoluto su confesión, estaba completamente fuera de si es mas no tiene un solo recuerdo de su madre en ese estado de molestia, por lo mismo vio como ella se puso de pie y se marcho fuera de la habitación, le dijo algo a su padre y luego se marcho.

Su padre se acerco con cierta mirada que no era exactamente de molestia ni nada por el estilo, todo lo contrario le parecio mas bien una mirada confidente y que al perecer el lo entendia a la perfección o almenos esa impresión le dio, por lo que al escuchar la voz reconfortante de aquel hombre que ha pesar de conocerlo muy poco, lo entendia a la perfección.

-si pero a ella no le hagrado mucho la idea, me siento mal por eso pero es algo que no puedo ocultar y menos a ustedes, sabia que mamá reaccionaría de esa manera, pero creo que me quede corto con sus palabras.

El moreno ojiverde sonrio y se encongio en hombros, tratando de cambiar aquella imagen de molestia de su madre, tratando de borrar aquellos ojos carmesi que por primera vez en su vida le inspiraron miedo. Pero las palabras de Lyan hicieron que le hibrido recordara aquellos momento que habia vivido tan solo horas atras con aquella musa que habia llegado a su vida y sin darse cuenta le habia cambiado la vida.

-ella es, perfecta no hay nadie que se compare con aquellos ojos y boca, su cabello tiene una fragancia como el mismo jazmín, su piel es tersa como un petalo de la flor mas hermosa que te puedas imaginar, su voz es canto hechizante que te pierde en y hace que caigas en ese infinito hechizo, vaya ella es -hizo una pequeña pausa, dejandose llevar por aquel recuerdo de aquella mujer que simplemente desde el primer momento lo cautivo, pero quese nego a admitir lo que su bombeante corazón le dictaba- ella es, es...por los dioses no tengo palabras para siquiera decifrar lo que ella es para mi.

Se acerco a su padre y lo abrazo con todas sus fuerzas, sabia que él lo entendia a la perfección si, entonces era similar lo que su padre siente por su madre, o al menos eso es lo que cree el pequeño -habla con ella, lo que menos quiero es que ella sea como era antes de que ambos lleguemos a su vida- por alguna extraña razón Tristán sabia que su madre no era la misma desde que él y su padre llegaron a cambiarle la vida, como vampiro que es, sabe a la perfección que ella es una asesina, aunque en mas profundo de su ser desea con todas sus fuerzas equivocarse.

Tranquilo Tristán, yo la convenceré-dije sonriente-Ten de momento paciencia que necesita adaptarse, ya veras como dentro de poco todo cambiará y será igual que antes.

Dije al escuchar palabras de lamentanción por parte de mi hijo.Para luego sonreí al escuchar a Tristán pronunciar aquellas que le llenaban a Tristán, se le veía muy alegre al describir a la dueña de su corazón. Me recordó tiempos atrás cuando conocí a Romina....

Le respondí el abrazo que medió Tristán-Muy bien, ara voy, quedate aquí.-dije dulcemente.

Salí de la casa mientras me paré un momento al ver la lluvia caer, -genial ahora me costaría más encontrar a Romina-pensé luego continué caminando por aquel bosque que se encontraba detrás de aquella Mansión en la que vivíamos.

Me fui mojando con el paso del tiempo, me paré cuando llegué a un claro y allí la encontré tumbada en posición fetal. Me acerqué a ella sonriente, mientras me sacudía el pelo de tanta agua que tenía acumulada en él. Me senté a su lado y la miré dulcemente y luego me tumbé hacia ella para que me pudiera ver y yo a ella.

Romina...-dije y alargué mi mano acariciandole la mejilla.-¿puedo hablar contigo?-pregunté porque a lo mejor todavía continuaba enfadada y no quería hablar.

El pequeño sonrio ante las palabras que su padre, sentía esa confidencialidad en ambos, mas que verlo como padre lo mira como un amigo un excelente a mi al cual le puede contar todo y solo recibira sabios consejos, independientemente de sus dos grandes amigos, Lyan es el mejor de todos ya que puede hablar con esa naturalidad que por su raza con no puede hablar con sus amigos humanos y menos decirles que esta completamente enamorado de una vampiresa de 6 mas de 600 años y que es la amiga de su madre que es ante la sociedad su tía.

Aquel abrazo fue una confort hacia el manojo de emosiones a flor de piel que el moreno comienza a sentir, primeo y sobre todo esta el inmeso amor que le profesa a su musa, pasando por la reacción negativa de su madre al saber de dicho sentimiento contrastado con la de su padre que le brindo la oportunidad de abrirce y describir todo lo que ella le trasmite y despierta, pero "¿que pensara mi Tío Olaf cuando se entere?" aquella pregunta fue algo extraña ya que tiene que no sabe absolutamente nada de él y ademas pues tiene muchas ganas de contarle como se siente con este cambio tan radical que ha comenzado a vivir; sin embargo noto algo preocupado a su padre, mismo que salio en busca de la algo "neurotica" madre que se manda, no puede negar sentir esa culpa al ver a su madre en ese estado de molestía y cierta tristeza ya que en parte es culpa suya que se este asi, pero es algo que tampoco puede negar sentir y mucho menos manifestar.

Al verse solo miro hacia ambos lados de la casa fantasiando en que su musa cruzara la puerta y entrara, corriera hacia a sus brazos y la besara freneticamente mezclando pasión y deseo en un simple beso de amor, pero eso no es posible ya que de saber quien es esa mujer, su hermosa madre la matara sin pensarlo.

-mi musa ¿donde estaras ahora?, si supieras cuanto te extraño.

Musito el pequeño lanzando una largo, porlongado y a la vez pausado suspiro, sonrio por debajo y lentamente se encamino hacia su habitación, pero durante el camino un ruido proveniente de afuera atrajo su atención al mirar por la ventana observo una densa lluvia que le ipedia ver mas alla de su propia visibilidad - rayos el rastro de mamá se le dificultara mucho a papá -susurró algo preocupado al no tener ni la mas remota idea de a donde acudiria su madre y tampoco por donde comenzara a buscar su padre, pero se encamnió hacia su habitación para cambiarse de ropa y esperar a que sus padres llegaran a casa y el drama comenzara nuevamente.

El pequeño trepo las escaleras, a paso lento, cansado y algo perezoso, tomo con una mano el barandal de le escalera y asi sostenerse para no caer de las escaleras, trepo cada uno con un trabajo impresionante como si los pies le pesaran cada dos pasos, asi estuvo hasta su llegada a la segunda planta, una vez en la estancia del segundo piso camino casi arrastras, llego hasta su puerta misma que abrio con una enorme dificultad, puesto que la pereza se habia posesionado del cuerpo del moreno, tiro sus cosas una vez adentrado en su habitación y casi gateando entro al baño, por lo que abrio la regadera y dejo caer el agua mientras se despojaba de sus prendas, una vez liberado de su ropa entro a la ducha y el agua baño su cuerpo, por lo que gruño ya que él y el agua no son muy buenos amigos, pero si no se ducha las cosas seran mucho peor...luego de varios minutos salio del baño fresco y con cierta preocupación de no saber como estara su madre cuando llegue, en estado de animo ya que fisicamente estara completamente empapad por la lluvia.

Lentamente me fui incorporando ante la presencia y voz de Lyan y mas al sentirlo tan cerca de mi, por lo que me estire y me apoye sobre su cuerpo como una niña, lo abrace y me aferre a él, dejando que su cuerpo me cubreira, sintiendome protegida entre sus brazos, intenrando olvidar lo que mi hijo acaba de decir, no se siento que es muy pronto para que sienta semejante cosa, ademas y si esa no le correponde, eso le dolera mucho y eso si me desvastaria verlo llorar y sufrir eso si no lo sporttaria ni un solo segundo.

-abrazame lo mas fuerte que puedas por favor no me digas nada solo abrazame.

Musite con voz algo entrecortada, perdiendome en los brazos de Lyan escuchando el latir de su cozarón, aspirando su aroma y dejando que las gotas de lluvia golpearan mi cuerpo. ¿En que momento dejo de ser un niño? pense detenidamente, recordando como antes pedía a gritos mi proteccción, cuidados y cariño, ¿en que momento creciste mi vida?, esa pregunta que me hice a mi misma jamas tendra una simple respuesta.

Supongo que es la ley de la vida, los humanos asi lo sentiran y asi lo sabran y estaran algo acostumbrados, pero yo no me acostumbrare a ello, almenos no por ahora, no este momento y no debido a estas circunstancias.

-se que me estoy comportando como una niña, pero entiendeme es mi bebé, mi pequeño, la luz de mi vida.

Musite acercandome hacia Lyan, por lo que bese sus labios lentamente, y apoye mi cabeza junto a la suya, deposite en pequeño beso en su mejilla y perdi la mirada hacia ningun lado, ya que no tenia ninguna idea clara de nada, todo fue muy rapido que no entendi nada.

-Ahora dime ¿de que quieres que hablemos?

Prengunte con cierta curiosidad para intentar calmarme e intentar olvidar lo que esta pasando con mi bebé, y que mejor manera de que hablar con mi amado Lyan - te acuerdas como nos conocimos- pregunte con un aire nostalgico, recordado ese maravilloso día que cambio mi vida, aquel día que hizo que mi vida torne un rumbo distinto, dejando a tras a la mujer que compartia su cama con cualquier hombre, para solo compartirla con Lyan, mi Lyan el unico al que amo, amare y dejare de amar cuando los dioses me llamen a su lado.

Sonreí al ver que se acercaba a mi y la abracé fuertemente sintiendola cerca de mi. Necesitaba mi apoyo así que se lo di abrazandola. Pensaba en como se había comportado y esperé a que me contestará la pregunta que le había hecho...

Al escucharla decir que la abrazara más fuerte me quedé impactado, parecía una niña asustada, la miré dulcemente y le di el calor que ella necesitaba, la abracé fuertemente. Supongo que se sentía imponente ante tal situación-pensé.

Lo se,te entiendo, se que te duele, pero tendrás que aceptarlo...

Dije susurrando dulcemente mientras la abrazaba, esperaba que se sintiera bien y pudiera empezar a hablar de los sentimientos de Tristán, se que para ella todavía era un niño, pero ya había crecido, sabía como era y lo entendía muy bien...

Le devolví el beso de la misma manera lento y pausado, cuando deposito sus labios en mi mejilla simplemente no pude evitar sonreír.

Al hacerme esa pregunta abrí la boca para contestarla, pero cambió de tema drásticamente y entonces me callé, sin decir nada. Me gustó que sacará el tema porque así es como intentaría convencerla. Me senté mientras el agua caía y hice que Romina se sentará en mi regazo y la abracé por detrás.

Me acuerdo mucho de aquel día, ese día pasé de ser una alma errante sin dirección a empezar a tener una vida-dije esto y le tomé una mano y el besé el lado opuesto a la palma de su mano-Justamente ese día tenía 17 años cuando te conocí, los mismos que ahora mismo aparenta Tristán. Por eso no le veo porque no lo entiendes, simplemente confía en él, sabes él me hace ver las cosas de otra manera-dije sonriente lo último-Deja que el viva la vida, puede que le hagan daño pero, tarde o temprano pasará no puedes dejarle encerrado como un pájaro que necesita volar...-dije mirandola-Cuando le sucedan cosas malas nos tendrá a nosotros de apoyo, pero no puede hacerlo si tu no se lo das-dije abrazandola fuertemente e hice una pausa-

Sabía que ibas a reaccionar de ese modo-dije con una sonrisa-pero me recordaste a aquella Romina que en tiempos anteriores, le convirtieron en vampiro y iba matando a todo el que se le cruzaba por el camino...

Pensé que tendría que volver a luchar contra ti-dije en mi mente pero no me gustó pensarlo, la primera vez que nos encontramos acabamos luchando y al verla en ese estado me sentí culpable así que no me gustaba que volviese a suceder... Aunque fuera por intentar que no le hiciera daño al amor de Tristán.

Te quiero-dije y la agarré del mentón para que me mirara y la besé-¿Que sientes cuando te beso?Probablemente lo mismo que siente Tristán en este momento...-dije volviendola a abrazar.

Los calidos brazos de Lyan recorrer mi cuerpo hicieron que reaccionara de manera diferente y extraña, y mas aun al escuchar sus palabras mismas que ocasionaron un enorme escalofrío sobre mi cuerpo mismo que recorrio cada parte de mi, a una velocidad sumamente lenta, luego senti pequeñas punzadas en mi interior, sin duda alguna sus palabras estaban llenas de razón, pero no puedo evitar sentirmde de esta manera es algo que me inquieta, molesta y adecir verdad me incomoda.

-si lo se, tienes mucha razón pero, es mi bebé no puedo evitar sentrirme asi.

Me gire y apoye la cara sobre su pecho, ocultandola de todo roce de agua y viento, resguardandome como antes, pero esta vez no era miedo lo que mi cuerpo sentía si no simplemente era una sensación diferente, extraña y nueva nose si se deba a la fabulosa noticia de mi hijo, pero es algo que simplemente no puedo evitar.

Suspire ante cada palabra, me apoye mas a su regaso mientras continuaba, apretando las manos a cada momento ante la simple idea de ver a mi bebé en los brazos de una mujer, aprete las manos de coraje e impotencia de saber simplemente que mi hijo ya no depende tanto de mi, ahora su vida esta tomando un camino y ese no conduce hacia mi, si no hacia otra persona.

Lentamente me separe de su lado y al mirar fijamente a Lyan su beso hizo que me estremeciera como aquella primera vez en que probe sus labios, pero ahora fue algo que simplemente me parecio nueva y hermosa, luego de ese beso nuevamente su voz estremecio mi ser, haciendo una pregunta que jamas paso por mi mente ¿Que sientes cuando te beso?Probablemente lo mismo que siente Tristán en este momento esas simples palabras jamas se me hubieran cruzado por la mente.

-¿qué siento?, buena pregunta siento que todo se detiene y que solamente existimos tu yo, siento unas ganas de ser completamente tuya hasta el fin de los tiempos, siento esa maravillosa necesidad de perderme solo en tus labios- me detuve un momento mientras mis dedos comenzaron a dibujar la silueta de sus labios, rosandolos y sintiendo la carnosidad y suavidad al tacto- ademas fueron tus labios los que me enamoraron como una loca de ti.

Musite delicadamente mientras apoyaba mi frente sobre su barbilla, quedandome en silencio y escuchando el estruendo de las gotas de lluvia caer sobre la tierra y hojas de los árboles, para luego rodear su cuerpo con mis manos y apoyarme a su hombre sintiendo su respiración a mi espalda, imaginando miles de cosas y sin pensar en nada a la vez, viendo hacia un lugar y sin mirarlo a la vez, para luego cerrar los ojos y besarle el hombro a Lyan luego de eso, me aparte de su lado mientras hacia chocar mis ojos con los suyos.

-no prometo nada pero, tratare de sobrellevar esta situación, no me pidas mucho pero intentare asimilar lo que esta pasando.

Decidida y seria fue la manera mas precisa de hablarle, se que no sera nada facil y mucho menos sera muy agradable conocer a la famosa mujer que le robo el corazón a Tristán pero, pondre todo mi esfuerzo en tratar de asimilar esta situación - te habia dicho cuanto te amo -pregunte curiosa, divertda y completamente enamorada, igual o mas que hace tanto tiempo, sonriendole gracialmente y a la vez seductora.