Caminando en Londres [Libre]

Llegó, tras estar toda la noche corriendo, llegó a Londres, hace tiempo que no estaba por ese lugar. Se acomodo su chaqueta, colocó la capucha ocultando su cabello bajo está. Y empezó a caminar con su manos en los bolsillos mirando todo él lugar.

Realmente empezaba a creer que era una imprudencia enorme sali sola y en un lugar desconocido a la merced de la Lycan. Le llegó el miedo, no podia negarlo, asi que se mescló entre mucha gente, en el centro comercial, buscando un lugar donde no la dañe.

Observó a lo lejos una chaqueta sin dueño *Quizá podria intercambiar el olor* pensó mirando la chaqueta.

Escuchó su voz. Menos mal se habia cambiado de chaqueta y se la habia puesto al revez para que no le den problemas.

La habia encontrado será cuestión de escapar otra vez, sabia que era una immprudencia de su parte, pero no...ella siempre hace otra cosa de lo que deberia, maldita mania la suya.

Se habia escondido en el baño *mierda, mierda* pensaba mientras estaba sentada en el piso abrazando sus rodillas y se movia suavemente de atras para delante

¿como es que acepte, como rayos fue que me meti en esta maldita encrucijada, no agrada tener que hacer esta sarta de cosas pero es su vida o la mia y ya perdi a mi familia por culpa de esos demonio y ahora no pretendo perder la mia.

Recorri el centro comercial por completo pasando desapersivida de la mirada de los humanos, simplemente era observada por esa mirada purpura de aquel demonio que me vigila pra saber si hare o no un buen trabajo.

Me deje guiar por su aroma que estaba completamente escondido o mas bien lo habia mezclado con el de un humano, pero sin embrago no se oculto por mucho tiempo ya que luego de 30 minutos de buscarla bien di con ella en un baño de la plaza...entre a ese lugar y le puse cerrojo a la puerta para que nadie nos moleste.

-donde estas meztisa sal y deja de escondete como una cobarde.

Mi voz fue clara, molesta y cansada ya que varios años atras llavo de tras de ella y ya me harte de lo mismo. La chiquilla hizo caso omiso de mi voz ya que simplemente se escucho un pequeño silencio en el lugar por lo que me di a la tarea de abri las puertas de los cubiculos de cada pequeño espacio de los baños del centro comercial; una a una comence abrilas dando una pequeña patada a las puertas, hasta dar con ella en uno de los cubiculos.

-vez no puedes ecapar tan facil

Le sonrei maliciosamente mientras mi mirda azul choco con la de la hibrido.

Eso dices- respondió mirandola fijamente a los ojos empezando a usar su habilidad con ella. Primero empezó con un puntito negro sobre sus globo oculares que iba creciendo y creciendo hasta dejarla ciega. Lo cual le daria unos minutos para escapar. Aprovechando el momento en que estaba desesperada por que no podia ver, y volviendo a agradecer que haiga heredado la fuerza en sus piernas de su padre, saltó por ensima de ella y salió corriendo del baño dejando tras ella solo el polvillo que levantaba al correr.

Salió del Centro comercial y se escondió en un parque. si quizá era un lugar al aire libre pero estaba lleno de gente. no la Podria atacar. Era domingo, dia familiar, en que todos los padres salen con sus hijos a aprovechar del sol y de la frescura.

Se sacó la chaqueta y la tiró a la basura esperando entregarle un pista falsa

-maldita.

Musite llevando las manos a la cara, ya que esto comenzaron a lagrimar descontroladamente y sin que pueda hacer nada para evitarlo, los ojos me ardian y no podia hacer nada para detenerla ya que no veia nada, no podia siquiera mirar mis pies. Obviamente la hibrido logro salir y escapar, dejandome sola en el baño, en ese momento el demonio cuyo nombre nunca me ha querido decir se menifesto, golpeando mi rostro y leugo levantendome con una fuerza increible.

mas te vale Yaiza que me traigas a es error de la naturaleza o de lo contrario tu alma se va conmigo al inframundo.

El terror se apodero de mi, para luego caer como una hoja de palpel a suelo;luego de un pequeño momento me puse de piel y sali del baño, comenzando a caminar algo adolorida por el golpe, mire por ambos lados y no la veia, y mucho menos persivia.

-donde te metiste.

Tambaleante y temerosa comence buscar el rastro de la mestiza, tenia que encontrarla o de lo contrario mi vida llegaria a su fin, ya habia asesiado a su familia por estar en el lugar equivocado y ala ora equivocada, ese maldito demonio me utilizo acambio de cobrar venganza por la muerte de mis padres y hermanos, pero eso jamas sucedio y acambio quede a sus servicios y mate a la famlia de esta pobre chica que no tiene nada que ver en mi vida ya qu l anterior que estaba en mi lugar, su alma esta ardiendo en lo mas profundo del infierno tal y como yo estare si desobedesco a ese aldito ser.

Casi adolorida y completamene retablecida sali de la plaza comercial y comence buscala, pero antes otr olor llego hasta mi, alguien que es como Tristán pero que ademas se complementa con otro que no alcanzo a reconocer.

-otra mestiza.

susurre dejando que mis palabras sean arrastrasdas por el viento, lleve una de mis manos hacia uno de mis costillas la cual me punzaba, hice una mueca de dolor y segui caminando, hasta llegar a un parque.

-sal niña, por favor sal.

Con la voz entrecortada por el dolor llame a una de las dos mestizas, apesar de regenerarme muy rápido, el dolor que me estaba provocando la punzada en una de mis costillas, no cesaba y me mataba.

Temerosa pero al escuchar dolor en su voz. salió tras el arbol, si le hacia algo volveria a escapar.

Se acercó a ella lentemente mientras veia como se tomaba el lado. Se mordió el labio inferior preocupada, no lo negaria...no podia ver a la gente sufrir.

Llegó a su nariz otro aroma *otra mestiza* pensó buscando con la mirada sin dejar de estar atenta a cualquier movimiento que probeniera de la Lycan

Las mestizas se hicieron presentes a la que estoy cazando permanecio en silencio y la otra que era mitad licantropo me hablo y se presento, mira con cierto recelo a ambas y frunci el seño, no tenia planeado atacarlas todo lo contrario, pero el demonio estaba muy creca y no queria molestarlo ya que de lo contrario mi vida esta en peligro.

-Yaiza, supongo que encantada, aunque no creo que sea el momento mas apropiado las presentaciones

Mira a la mestiza que se habia presentado mientras dirigi la mirada a la mitad vampiro con recelo y molestia, se que no es su culpa pero por ella estoy en este problema.

-y tu, mejor huye lo mas lejos que puedad y donde no te pueda encontrar ya que no te quiero asesinar, huye, vete, corre no quiero que mueras como murio mi familia.

Musite casi en silencio, advirtiendole de que por estar algo herida no pretendendia matarla todo lo contrario, pero ¿me hara caso?

Me mordió el labió inferior ignorando a la otra mestiza, la Lycan no era mala y se lo estaba demostrando. Me advertia que me fuera, que corriera por mi vida; cualquiera aceptaria la advertiencia y huiria pero ella no lo haria.

La Lycan estaba mal, herida y la estaba ayudando, por lo que lo unico que podia hacer era ayudarla, salvar su vida para devolverle el favor, algo tonto lo sabia ya que ella la habia estado persiguiendo toda su vida pero yo no la dejaria asi, ni hoy ni nunca correria como una cobarde.

- Al diablo mi vida- respondi- tu estas mal y no te voy a dejar- agregé